Programas de terapia física amables, adaptados a las necesidades particulares del paciente, quien con el apoyo constante del terapeuta, aprende de manera consciente a manejar su cuerpo, con el objetivo de eliminar y/o reducir el dolor o el impacto de los síntomas en el desempeño funcional de sus rutinas diarias, asegurando así un alto nivel de recuperación.

• Atención presencial, telefónica o por vídeo llamada.

• Valoración física y orientación sobre la especialidad médica requerida según el dolor.

• Recomendaciones sobre el qué hacer cuando duele una parte del cuerpo y así reducir estadía en una sala de urgencias.

Férulas, Fajas, Rodilleras, Tobilleras, Correctores de Postura, Muletas, Bastones, Almohadas y Cojines de soporte terapéutico.